Para desarrollar esta locura financiera, había que esperar la revelación del misterio de la tasa de interés por parte de la FED, en USA, el pasado 18 de septiembre. Finalmente, resultó en una baja de 0.5%, que dejó poco convencidos a todos los especuladores. Pero también, supimos acera del recorte de tasa de interés por parte de China comunista.

Pero, tras estos recortes, especialmente en USA, destella la posibilidad muy cierta de un próximo período hiper inflacionario. ¡Veamos!

Un flashback hacia el concepto de inflación

Primero, es necesario recordar que los precios varían por diversas circunstancias, dependiendo del mercado que se trate, obedecen a determinadas condiciones que establecen abundancia o escasez presente o futura. Fue lo que observó Munehisa Homma, el comerciante japonés que inventó el sistema conocido como las velas japonesas, en el siglo XVIII. Las velas japonesas muestran el pulso constante del mercado y permite comprender su comportamiento para la toma de decisiones. Las velas japonesas constituyen un espejo fiel acerca de las variaciones de precios en el tiempo.

En tanto, las academias de economía enseñan que el aumento sostenido de precios, en un lapso determinado, conforman un escenario de inflación.

Generalmente se señalan estas causas de inflación:

  1. Demanda excesiva: Ocurre cuando la demanda de bienes y servicios supera la capacidad de producción de la economía. Esto puede suceder en períodos de crecimiento económico, donde el consumo aumenta y los precios suben.
  2. Aumento de costos: Si los costos de producción, como salarios y materias primas, aumentan, las empresas pueden trasladar esos costos a los consumidores elevando los precios. Esto se conoce como inflación de costos.
  3. Expansión monetaria: Cuando un banco central emite más dinero del que la economía puede absorber, esto puede llevar a un aumento de la inflación. Un exceso de dinero en circulación puede hacer que los precios suban.
  4. Políticas fiscales expansivas: Un aumento en el gasto público sin un aumento correspondiente en los ingresos puede provocar un déficit fiscal que, si se financia con emisión monetaria, puede generar inflación.
  5. Expectativas inflacionarias: Si los consumidores y empresas anticipan que los precios aumentarán en el futuro, pueden actuar en consecuencia, aumentando la demanda o ajustando precios, lo que a su vez puede alimentar la inflación.
  6. Factores externos: La inflación también puede ser impulsada por factores externos, como el aumento de los precios de las materias primas (por ejemplo, petróleo) debido a conflictos geopolíticos o desastres naturales.
  7. Devaluación de la moneda: Cuando una moneda pierde valor frente a otras divisas, los precios de los productos importados aumentan, lo que puede contribuir a la inflación.

Sin embargo, existen otros factores que también contribuyen.

Detrás de la cortina de la inflación

Como vimos, la emisión monetaria, el volumen de circulante en las calles, es un factor de presión que empuja los precios al alza. Más aún, si el banco central aplica una política de expansión, imprimiendo billetes hasta el cielo. En realidad, gran parte del dinero no se imprime, no tiene existencia física real, simplemente se van llenando las bases de datos para que los bancos puedan «entregar» los dineros que son para préstamos. Si, el dinero es deuda. Esto ya es la locura financiera total, desde que USA, el ex presidente Nixon, terminó con el patrón oro, en 1971.

Ya que hablamos de deuda, llegamos al segundo factor frecuentemente desatendido por los medios: el interés. En las aulas se le denomina el costo del dinero o del capital. Pero ya, con el interés compuesto (interés sobre interés) el asunto se distorsiona.

Los bancos emiten dinero privado (virtual), el cual genera inflación, porque hace aparecer dinero que antes no estaba, como el mago que saca un conejo del sombrero. Se supone que el dinero tiene respaldo. ¿Cuál es el respaldo del dinero generado por los intereses? ¿La deuda? Este dinero no tiene respaldo concreto, entonces, entra en circulación y provoca empuje para que los precios suban más. Aquí hay una paradoja: ¿De dónde se nutre el dinero que se inyecta a la economía? No hay suficiente riqueza para todo el dinero que se inyecta a la economía. Luego, los bancos ingresan a la economía dinero que no existe. Se toman una atribución que corresponde al banco central, gracias al sistema de reserva fraccionaria.

Otro factor que afecta a la inflación, proviene del manejo de la moneda. Veamos. En la economía real, si una empresa quiere aumentar sus ingresos, debe aumentar su capacidad instalada (invertir), trabajo y capital. Sin embargo, en las finanzas, esto es diferente. El especulador requiere generar una necesidad ficticia, porque al Estado le quitan la capacidad de emitir moneda soberana. Esto es así, porque el Estado no tiene presupuesto para financiar proyectos de inversión de los ciudadanos.

Así, las personas no tienen más alternativa que ir a golpear las puertas de los bancos comerciales para mendigar préstamos. Los bancos, en efecto, con toda generosidad, otorgan préstamos, cobrando intereses (muchas veces monstruosos). Aquí se nota que la moneda no es algo público, porque beneficia a los grandes capitales financieros. Así, el banco central emite moneda, que es transportada a los bancos comerciales, para que estos presten el dinero. Entonces, la disponibilidad del dinero no fluye directamente a las personas, porque fluye primero hacia las empresas y no hacia las capas sociales básicas de una nación.

Como se interrumpe el flujo monetario directo desde el banco central a los ciudadanos, los bancos tienden a favorecer a ciertos grupos relacionados financiera o comercialmente. Estos grupos relacionados, entonces, reciben las primeras grandes sumas de dinero, mediante préstamos en condiciones cómodas. Mientras que, gracias al sistema de reserva fraccionaria, el resto de dinero disponible para préstamos, va rotando con mayor retardo, en condiciones más exigentes y ya con un nivel de precios superior a aquellos que recibieron el reparto inicial.

Será importante tener claridad sobre estos factores, para comprender la próxima gran recesión que llegará y es inevitable. Por favor, tomar decisiones oportunas, para reducir el ataque de la locura financiera.

Reflexiones Finales

Puede ser algo tedioso seguir el hilo de la locura. Pero es necesario comprender los puntos críticos, precisamente para no volverse locos.

Mejor, resumimos el relato en la figura 1. Así, espero que la comprensión de la locura financiera sea más sencilla.